Despedimos el año, esta misma semana se termina el 2009. Y en el ámbito, personal, empresarial, institucional o de cualquier otra empresa humana es momento de hacer un alto en el camino, reflexionar sobre lo que logramos o no alcanzamos este año y lo que nos proponemos realizar en el año que comenzará en unos días más.
A nivel nacional se prevé que en las cámaras legislativas se realice un análisis profundo así como su correspondiente debate y se pueda aterrizar una nueva reforma fiscal integral. Será el año legislativo más propicio para reformas sustanciales, si los legisladores y el gobierno tienen los tamaños para ello. Al mismo tiempo el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) dará su última batalla contra el estado mexicano que ha decretado (ahora sí) la extinción de Luz Y Fuerza del Centro, lo que ocasionará movilizaciones y manifestaciones propias de los estertores mortuorios de este ineficiente dinosaurio. Y no pueden faltar los festejos, para este año doble, pues se conmemora el bicentenario de la Independencia y el centenario de la Revolución, de manera que no pararemos por fiestas.
A nivel estatal tendremos elecciones para renovar al gobernador, los diputados locales y los 217 Ayuntamientos. Los comicios se llevarán a cabo el primer domingo de julio lo que provocará que los seis primeros meses del año se dediquen a una intensa competencia electoral que seguramente irá desde las propuestas poco publicitadas hasta los escándalos que tanto gustan a los morbosos y sobre todo a los medios de comunicación. Y la segunda parte del año se centrará en el recuento y los litigios post electorales. El lapso de más de seis meses entre la elección y las tomas de posesión generarán una dinámica política sui generis con un fuerte desgaste político para los que salen y para los que entran, muera el rey viva el rey.
Llega a su fin el sexenio precioso, o mejor dicho el sexenio horribilis, esa es una buena noticia. Se va el gobernante de más infausta memoria para Puebla y los Poblanos, esperen que pasen las elecciones y verán cómo se expresarán de él hasta los paleros que hoy le aplauden, al tiempo.
En el ámbito económico se espera la recuperación de los mercados y por consecuencia la recuperación de empleos y la mejora en los bolsillos de los ciudadanos. En el caso de Puebla la propia dinámica electoral derramará más recursos principalmente en el primer semestre lo que favorecerá el crecimiento económico.
A nivel individual seguramente nos trazaremos nuestras metas y trataremos de conseguir nuestros propósitos, mis mejores deseos para que puedan alcanzarlos, con salud y felicidad. Seguramente habrá sorpresas que nos depara el destino. Mucho éxito para todos en el 2010, ¡salud!
A nivel nacional se prevé que en las cámaras legislativas se realice un análisis profundo así como su correspondiente debate y se pueda aterrizar una nueva reforma fiscal integral. Será el año legislativo más propicio para reformas sustanciales, si los legisladores y el gobierno tienen los tamaños para ello. Al mismo tiempo el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) dará su última batalla contra el estado mexicano que ha decretado (ahora sí) la extinción de Luz Y Fuerza del Centro, lo que ocasionará movilizaciones y manifestaciones propias de los estertores mortuorios de este ineficiente dinosaurio. Y no pueden faltar los festejos, para este año doble, pues se conmemora el bicentenario de la Independencia y el centenario de la Revolución, de manera que no pararemos por fiestas.
A nivel estatal tendremos elecciones para renovar al gobernador, los diputados locales y los 217 Ayuntamientos. Los comicios se llevarán a cabo el primer domingo de julio lo que provocará que los seis primeros meses del año se dediquen a una intensa competencia electoral que seguramente irá desde las propuestas poco publicitadas hasta los escándalos que tanto gustan a los morbosos y sobre todo a los medios de comunicación. Y la segunda parte del año se centrará en el recuento y los litigios post electorales. El lapso de más de seis meses entre la elección y las tomas de posesión generarán una dinámica política sui generis con un fuerte desgaste político para los que salen y para los que entran, muera el rey viva el rey.
Llega a su fin el sexenio precioso, o mejor dicho el sexenio horribilis, esa es una buena noticia. Se va el gobernante de más infausta memoria para Puebla y los Poblanos, esperen que pasen las elecciones y verán cómo se expresarán de él hasta los paleros que hoy le aplauden, al tiempo.
En el ámbito económico se espera la recuperación de los mercados y por consecuencia la recuperación de empleos y la mejora en los bolsillos de los ciudadanos. En el caso de Puebla la propia dinámica electoral derramará más recursos principalmente en el primer semestre lo que favorecerá el crecimiento económico.
A nivel individual seguramente nos trazaremos nuestras metas y trataremos de conseguir nuestros propósitos, mis mejores deseos para que puedan alcanzarlos, con salud y felicidad. Seguramente habrá sorpresas que nos depara el destino. Mucho éxito para todos en el 2010, ¡salud!
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