Por José Antonio Díaz García* Dinero. ¡Qué poco valor puede tener el dinero si la vida de un ser humano está en juego!
Así escribía hace unos días el presidente del Consejo de Administración del Grupo Financiero Banamex, Alfredo Harp Helú, ante la muerte del joven Fernando Martí. Así escribía un hombre que fue secuestrado en 1994, estuvo 106 días en cautiverio y salió con vida.
Así pueden escribir los cientos de mexicanos que han vivido el terror de un familiar secuestrado; así clamamos millones de personas que no queremos ser presas del miedo y la zozobra de vivir en un país donde se corre el riesgo de ser privado de la libertad; donde nuestros hijos pueden ser víctimas de mentes enfermas de ambición, de dinero, de poder o de venganza social.
A principios de este 2008, solicité a la Procuraduría General de la República (PGR) a través del Instituto Federal de Acceso a al Información (IFAI), el número de víctimas por secuestro, de los últimos 7 años y lo que va de este.
Comparto esta información porque sin duda es un tema de seguridad nacional pero sobretodo de seguridad familiar donde, por desgracia, México es un país donde el índice de secuestros va de nuevo en aumento junto con la creciente incertidumbre e inseguridad que percibimos los mexicanos.
En la respuesta que me envió la Procuraduría General de la República (PGR) documentan los secuestros en los que la Agencia Federal de Investigaciones (AFI) ha coadyuvado con las autoridades de las entidades federativas.
Esto sucede cuando la PGR ha atraído los casos, porque el Ministerio Público ejerce facultad de atracción.
Hay que considerar entonces que los datos que a continuación expongo sólo son una parte de los secuestros registrados en México en los últimos siete años y medio, ya que a estos hay que sumarle los que no atrajo la PGR y los que no fueron denunciados, que seguramente son muchos puesto que buena parte de las víctimas, por ejemplo de secuestros Express, cuando son liberadas prefieren no dar cuenta a las autoridades por miedo a represalias y porque los secuestradores amenazan con dañar a familiares cercanos.
Las cifras de la PGR reportan a nivel nacional, 1089 secuestros de 2001 a mayo de 2008, de los cuales 930 fueron de adultos y 159 de menores de edad.
De los 930 adultos privados de su libertad 257 fueron mujeres y 673 hombres, mientras que de los menores, el 40.8 por ciento fueron niñas (65 plagios) y el 59.1 por ciento varones (94).
Los años con mayor número de secuestros en este lapso fueron 2004 con 200 secuestros, 2007 con 178, 2003 con 167 y 2005 con 158. En lo que va de 2008 se han registrado 106, sin contar el trágico y reciento secuestro seguido de asesinato de Fernando Martí de 14 años que fue “levantado” el pasado 4 de junio.
Al comparar las entidades federativas, el Distrito Federal ocupa el primer lugar en secuestros con un total de 494 en casi 8 años, de los cuales el 14.7 por ciento fueron de menores de edad siendo entre 2003 y 2007 cuando se registraron un mayor número de privaciones de la libertad.
En segundo lugar se encuentra el Estado de México con 368 secuestros de los cuales 65 fueron menores y 303 de adultos; en tercero Guerrero, seguido de Baja California, Oaxaca, Morelos y Veracruz.
Puebla registra 7 secuestros de adultos, dos en 2004, uno en cada uno de los otros años con excepción del 2000 y el 2005 que no reportan ninguno.
Comparado con otras entidades, la nuestra parecería segura como lo señalaron recientemente las autoridades locales. Para el procurador de Justicia del estado Rodolfo Igor Archundia Sierra, hay tres o cuatro denuncias por secuestro al año; el Secretario de Seguridad Pública Municipal, Guillermo Alberto Hidalgo Vigueras considera que sí existen problemas de delincuencia en la ciudad de Puebla, pero no son tan alarmantes como se denuncian; y para rematar el subsecretario de Gobernación, Joe Hernández Corona, consideró innecesaria la posibilidad de reforzar la seguridad pública en el estado o establecer más operativos de vigilancia al considerar a Puebla como un estado seguro y tranquilo.
Sin embargo, el periódico digital e-consulta recién publicó que en lo que va del año se han registrado en Puebla al menos diez secuestros -no denunciados por miedo- así como cuatro ejecuciones en zonas como Tehuacán, Atlixco, Xicotepec de Juárez, Huauchinango, Puebla capital, entre otros.
Y lo peor del caso es que en todo el país, buena parte de los secuestradores cuentan con la protección o pero aún, con la participación de autoridades judiciales como lo acabamos de ver en el caso del joven Martí.
Cómo no preocuparnos si la impunidad sigue siendo el principal problema para el desarrollo de México, porque mientras ésta prevalezca no habrá confianza para invertir, ni seguridad para crecer, ni garantías de que nuestros impuestos se emplean en cuidarnos y no en pagar policías que delinquen, en ministerios públicos ineficientes y coludidos, o en jueces que se lavan las manos.
La presidenta de la asociación civil México Unido contra la delincuencia, María Elena Morera, denunció hace un par de semanas la libración por parte de jueces de la Ciudad de México, de 251 personas acusadas por secuestro sin que hayan cumplido sentencia y desde luego sin estar readaptados.
Los grupos de secuestradores pueden tener fines diversos, desde financiar al crimen organizado, léase guerrilla o narcotráfico, hasta conseguir dinero “fácil”. No importa el móvil, someter a la víctima y a su familia a un régimen de terror, requiere de todo el peso de la ley, y desde luego su cumplimiento, porque si bien la cadena perpetua propuesta por el Presidente Calderón podría dar mayor certeza a quienes fueron blanco del secuestro -y permanecieron con vida-, de no volverse a encontrar a sus plagiarios, de nada serviría si se les libera por falta de pruebas.
Esta misma pena de cárcel vitalicia, debiera aplicarse a las autoridades coludidas con todo el rigor porque si ya de por sí el secuestro es abominable, que lo respalde y organice la autoridad que está para servir y cuidar a los ciudadanos, es un crimen que debe castigarse con toda dureza.
Comentarios diazgarcia2020@gmail.com
http://www.diazgarcia2020.blogspot.com/
*Diputado Federal por el Partido Acción Nacional
A principios de este 2008, solicité a la Procuraduría General de la República (PGR) a través del Instituto Federal de Acceso a al Información (IFAI), el número de víctimas por secuestro, de los últimos 7 años y lo que va de este.
Comparto esta información porque sin duda es un tema de seguridad nacional pero sobretodo de seguridad familiar donde, por desgracia, México es un país donde el índice de secuestros va de nuevo en aumento junto con la creciente incertidumbre e inseguridad que percibimos los mexicanos.
En la respuesta que me envió la Procuraduría General de la República (PGR) documentan los secuestros en los que la Agencia Federal de Investigaciones (AFI) ha coadyuvado con las autoridades de las entidades federativas.
Esto sucede cuando la PGR ha atraído los casos, porque el Ministerio Público ejerce facultad de atracción.
Hay que considerar entonces que los datos que a continuación expongo sólo son una parte de los secuestros registrados en México en los últimos siete años y medio, ya que a estos hay que sumarle los que no atrajo la PGR y los que no fueron denunciados, que seguramente son muchos puesto que buena parte de las víctimas, por ejemplo de secuestros Express, cuando son liberadas prefieren no dar cuenta a las autoridades por miedo a represalias y porque los secuestradores amenazan con dañar a familiares cercanos.
Las cifras de la PGR reportan a nivel nacional, 1089 secuestros de 2001 a mayo de 2008, de los cuales 930 fueron de adultos y 159 de menores de edad.
De los 930 adultos privados de su libertad 257 fueron mujeres y 673 hombres, mientras que de los menores, el 40.8 por ciento fueron niñas (65 plagios) y el 59.1 por ciento varones (94).
Los años con mayor número de secuestros en este lapso fueron 2004 con 200 secuestros, 2007 con 178, 2003 con 167 y 2005 con 158. En lo que va de 2008 se han registrado 106, sin contar el trágico y reciento secuestro seguido de asesinato de Fernando Martí de 14 años que fue “levantado” el pasado 4 de junio.
Al comparar las entidades federativas, el Distrito Federal ocupa el primer lugar en secuestros con un total de 494 en casi 8 años, de los cuales el 14.7 por ciento fueron de menores de edad siendo entre 2003 y 2007 cuando se registraron un mayor número de privaciones de la libertad.
En segundo lugar se encuentra el Estado de México con 368 secuestros de los cuales 65 fueron menores y 303 de adultos; en tercero Guerrero, seguido de Baja California, Oaxaca, Morelos y Veracruz.
Puebla registra 7 secuestros de adultos, dos en 2004, uno en cada uno de los otros años con excepción del 2000 y el 2005 que no reportan ninguno.
Comparado con otras entidades, la nuestra parecería segura como lo señalaron recientemente las autoridades locales. Para el procurador de Justicia del estado Rodolfo Igor Archundia Sierra, hay tres o cuatro denuncias por secuestro al año; el Secretario de Seguridad Pública Municipal, Guillermo Alberto Hidalgo Vigueras considera que sí existen problemas de delincuencia en la ciudad de Puebla, pero no son tan alarmantes como se denuncian; y para rematar el subsecretario de Gobernación, Joe Hernández Corona, consideró innecesaria la posibilidad de reforzar la seguridad pública en el estado o establecer más operativos de vigilancia al considerar a Puebla como un estado seguro y tranquilo.
Sin embargo, el periódico digital e-consulta recién publicó que en lo que va del año se han registrado en Puebla al menos diez secuestros -no denunciados por miedo- así como cuatro ejecuciones en zonas como Tehuacán, Atlixco, Xicotepec de Juárez, Huauchinango, Puebla capital, entre otros.
Y lo peor del caso es que en todo el país, buena parte de los secuestradores cuentan con la protección o pero aún, con la participación de autoridades judiciales como lo acabamos de ver en el caso del joven Martí.
Cómo no preocuparnos si la impunidad sigue siendo el principal problema para el desarrollo de México, porque mientras ésta prevalezca no habrá confianza para invertir, ni seguridad para crecer, ni garantías de que nuestros impuestos se emplean en cuidarnos y no en pagar policías que delinquen, en ministerios públicos ineficientes y coludidos, o en jueces que se lavan las manos.
La presidenta de la asociación civil México Unido contra la delincuencia, María Elena Morera, denunció hace un par de semanas la libración por parte de jueces de la Ciudad de México, de 251 personas acusadas por secuestro sin que hayan cumplido sentencia y desde luego sin estar readaptados.
Los grupos de secuestradores pueden tener fines diversos, desde financiar al crimen organizado, léase guerrilla o narcotráfico, hasta conseguir dinero “fácil”. No importa el móvil, someter a la víctima y a su familia a un régimen de terror, requiere de todo el peso de la ley, y desde luego su cumplimiento, porque si bien la cadena perpetua propuesta por el Presidente Calderón podría dar mayor certeza a quienes fueron blanco del secuestro -y permanecieron con vida-, de no volverse a encontrar a sus plagiarios, de nada serviría si se les libera por falta de pruebas.
Esta misma pena de cárcel vitalicia, debiera aplicarse a las autoridades coludidas con todo el rigor porque si ya de por sí el secuestro es abominable, que lo respalde y organice la autoridad que está para servir y cuidar a los ciudadanos, es un crimen que debe castigarse con toda dureza.
Comentarios diazgarcia2020@gmail.com
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*Diputado Federal por el Partido Acción Nacional
2 comentarios:
HE LEÍDO SU ARTÍCULO DE LOS SECUESTROS Y ME PARECIÓ MUY INTERESANTE, PERO QUISIERA SABER CUAL ES SU POSICIÓN RESPECTO DE LA INSEGURIDAD, QUE PROPONE PARA MEJOR LA SEGURIDAD A NIVEL NACIONAL? ESTA DE ACUERDO CON LA POLICIA ÚNICA? ES FACTIBLE?
YO PIENSO QUE ES NECESARIA, PARA EMPEZAR A LIMPIAR LAS POLICIAS JUDICIALES, QUE YA NO DEBEN DE TENER CABIDA EN ESTE PAÍS,
HA GENERADO ALGUN PROYECTO DE LEY EN ESETE SENTIDO O SABE SI ALGUIEN YA LO GENERÓ?
SI NO LO HA GENERADO POR QUE NO LO HA GENERADO? SI ES UN TEMA TAN IMPORTANTE PARA TODO LOS MEXICANOS?
QUIZAS NO SEA PARTE DE SUS ATRIBUCIONES POR ESTAR EN EL CANAL DEL CONGRESO? ASI QUE LE SOLICITÓ QUE ME INFORME QUIEN O QUIENES SON LOS DIPUTADOS RESPONSABLES EN EL TEMA DE SEGURIDAD PUBLICA A NIVEL NACIONAL.
YO NO CREO QUE, LA PENA DE MUERTE NI MUCHO MENOS LA CADENA PERPETUA RESUELVAN EL PROBLEMA DE LA SEGURIDAD, Y MUCHO MENOS DE LOS SECUESTROS, YA QUE ESTADISTICAMENTE ESTOS DATOS SE PUEDEN COMPROBAR EN DIVERSOS PAISES QUE HAN ENDURECIDO SUS PENAS SIN MEJORES REULTADOS, YA QUE AL CRIMINAL NO SE LE DETIENE CON ESO, DEBIDO A QUE LA MAYORIA DE LOS CRIMINALES TIENEN CONCIENCIA DEL ACTO DELICTIVO QUE ESTAN COMETIENDO, ENTRE OTRAS COSAS.
YO CREO QUE SE NECESITA UNA REFORMA INTEGRAL EN MATERIA DE SEGURIDAD PUBLICA QUE VAYA DE LA MANO CON UNA REFORMA JUDICIAL EN MATERIA PENAL Y EN MATERIA PENITENCIARIA, QUE OJALA, LLEGARÁ EN ESTE SEXENIO. POR EJEMPLO POR QUE LOS SECUESTROS NO SO ELEVADOR POR LEY A RANGO DE DELITOS FEDERALES Y SON INVESTID¿GASO EN ESTE PAÍS POR LA AFI, PERSEGUIDOS POR LOS MINISTERIOS PUBLICCOS FEDERALES Y JUZGADOS POR JUECES FEDERALES.
AHI LE DEJO MIS COMENTARIOS, Y OJALA Y ME CONTESTE. POR SU ATENCIÓN MUCHAS GRACIAS.¡¡¡¡¡¡¡¡¡
ATTE.
EL NUMERO 917
Lector Anónimo:
El fenómeno de la inseguridad que vivimos hoy en día es bastante complejo, muchas de sus características obedecen a las consecuencias de la globalización. Sin embargo la unica manera que tenemos de enfrentarlo con eficiencia es teniendo una policia que responda a esas espectativas y un sistema de administracion y procuracion de justicia eficiente. De manera muy sucinta esa es mi opinión, junto con lo que he venido expresando en estos artículos y en diferentes ruedas de prensa.
Ahora bien, respecto a lo que en el congreso federal he realizado en este tema, te comento que la reforma al sistema de justicia penal que aprobamos hace unos meses obedece a esas espectativas de mejorar las herramientas juridicas que los encargados de la seguridad tienen a su alcance para ser mas eficientes. También el modificar la administracion de justicia a un sistema oral y moderno.
Mi especialidad no es el derecho, sin embargo como diputado federal es menester estudiar los temas que se someten a consideración del pleno y emitir las opniones y juicios al respecto.
Finalmente te comento que me he asesorado de especialistas para tener mas elementos de juicio y aportar al proceso legislativo en cuestión de seguridad. Al respecto la reforma de justicia aprobada recientemente contenía en su propuesta original algunos elementos que no compartía, como era el caso de los cateos sin orden judicial previa. Con esos elementos de juicio he participado en las discusiones internas del PAN para definir la postura común en las reformas sobre seguridad.
Mi propuesta especifica es que los diferentes ordenes policiacos que existen en el país sean sometidos a pruebas de lealtad. Ademas que los policias que pasen estas pruebas esten mejor capacitados, coordinados y pagados. Finalmente que en cuestión de seguridad las autoridades de todos los niveles de gobierno rindan cuentas, de manera que sepamos los ciudadanos a que nos enfrentamos exactamente.
Saludos
Jose Antonio Díaz García
Nota: en la pagina de internet de la camara de Diputados puedes encontrar la conformación de las comisiones legislativas que tienen en sus manos los temas legislativos de seguridad y justicia. www.diputados.gob.mx
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