Así se llama: el Conejobus, son los camiones del transporte público marca Volkswagen que en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, fueron introducidos a principios de este año 2010 como parte del programa de modernización del transporte público urbano, que además es un proyecto integral que cubre varios objetivos y que demuestra como el desarrollo de políticas públicas bien planeadas reditúa en pro de la sociedad y del medio ambiente.
El gobierno del estado de Chiapas desarrolló un programa para sustituir 144 unidades tipo combi en la ciudad de Tuxtla Gutiérrez y 48 unidades en Tapachula por 71 y 35 camiones respectivamente en las principales rutas de esas ciudades. Los nuevos camiones que ya están en circulación desde enero de este año usan biodiesel como combustible que es producido al 100% en Chiapas y que proviene de la “jatropha” o piñón que provee el aceite que se convierte en el combustible.
La “jatropha” permite reforestar y generar ingresos de 16 mil pesos al año por hectárea lo que desarrolla nuevos empleos y beneficios a campesinos, además la planta para producir el biodiesel tiene garantizada que su producción será comercializada pues su uso está comprometido con estas rutas de transporte público,
Chipas es la primera entidad federativa de México, productora de biodiesel, cuenta además con 10 mil hectáreas sembradas de piñón jatropha y 30 mil hectáreas con palma de aceite e higuerilla utilizados para el mismo fin.
Además el Conejobus utiliza la tecnología no solamente para ser más amigable con el medioambiente, también para el sistema de cobro, el de descuentos y el de supervisión. El costo de pasaje en estas nuevas unidades es de cuatro pesos para los pasajeros en general, dos pesos y cincuenta centavos para los usuarios de la tercera edad y tres pesos para los estudiantes de nivel medio, superior y medio-superior. Se cobra a través de tarjetas electrónicas que tendrán una vida útil de cinco años y que pueden ser recargadas en farmacias y tiendas de conveniencia. Cuenta con aire acondicionado, pantallas de televisión y barra contadora de pasaje para evitar el sobrecupo, además es supervisada la ruta mediante un sistema de posicionamiento global GPS.
La empresa creada para operar el Conejobus es mixta, con participación del gobierno del estado y de los concesionarios que ya operaban esas rutas, dando además certeza laboral a los operadores quienes cuentan con prestaciones de ley. Algunas unidades están equipadas para dar servicio a personas con capacidades diferentes.
Con el Conejobus se da cuenta de un sistema de transporte más amigable con el medio ambiente, que contamina menos y que genera una cadena productiva que incentiva al campo, promueve inversiones, impulsa la creación de nuevos empleos y tiene una visión de futuro para hacer ciudades sustentables.
Apoyemos iniciativas como la que ya opera en Chiapas para que más ciudades utilicen sistemas de transporte colectivo como el Conejobus. Enhorabuena para los chiapanecos.
*Consejero Nacional del PAN
El gobierno del estado de Chiapas desarrolló un programa para sustituir 144 unidades tipo combi en la ciudad de Tuxtla Gutiérrez y 48 unidades en Tapachula por 71 y 35 camiones respectivamente en las principales rutas de esas ciudades. Los nuevos camiones que ya están en circulación desde enero de este año usan biodiesel como combustible que es producido al 100% en Chiapas y que proviene de la “jatropha” o piñón que provee el aceite que se convierte en el combustible.
La “jatropha” permite reforestar y generar ingresos de 16 mil pesos al año por hectárea lo que desarrolla nuevos empleos y beneficios a campesinos, además la planta para producir el biodiesel tiene garantizada que su producción será comercializada pues su uso está comprometido con estas rutas de transporte público,
Chipas es la primera entidad federativa de México, productora de biodiesel, cuenta además con 10 mil hectáreas sembradas de piñón jatropha y 30 mil hectáreas con palma de aceite e higuerilla utilizados para el mismo fin.
Además el Conejobus utiliza la tecnología no solamente para ser más amigable con el medioambiente, también para el sistema de cobro, el de descuentos y el de supervisión. El costo de pasaje en estas nuevas unidades es de cuatro pesos para los pasajeros en general, dos pesos y cincuenta centavos para los usuarios de la tercera edad y tres pesos para los estudiantes de nivel medio, superior y medio-superior. Se cobra a través de tarjetas electrónicas que tendrán una vida útil de cinco años y que pueden ser recargadas en farmacias y tiendas de conveniencia. Cuenta con aire acondicionado, pantallas de televisión y barra contadora de pasaje para evitar el sobrecupo, además es supervisada la ruta mediante un sistema de posicionamiento global GPS.
La empresa creada para operar el Conejobus es mixta, con participación del gobierno del estado y de los concesionarios que ya operaban esas rutas, dando además certeza laboral a los operadores quienes cuentan con prestaciones de ley. Algunas unidades están equipadas para dar servicio a personas con capacidades diferentes.
Con el Conejobus se da cuenta de un sistema de transporte más amigable con el medio ambiente, que contamina menos y que genera una cadena productiva que incentiva al campo, promueve inversiones, impulsa la creación de nuevos empleos y tiene una visión de futuro para hacer ciudades sustentables.
Apoyemos iniciativas como la que ya opera en Chiapas para que más ciudades utilicen sistemas de transporte colectivo como el Conejobus. Enhorabuena para los chiapanecos.
*Consejero Nacional del PAN
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