El pasado 29 de diciembre los diputados locales del Distrito Federal del PRD David Razú, Maricela Contreras y Víctor Hugo Romo durante una rueda de prensa calumniaron y acusaron dolosamente al finado Cardenal Ernesto Corripio Ahumada, quien fuera arzobispo de Puebla, y hasta hoy no se han disculpado por tan graves acusaciones.
Las instituciones de justicia en México deben castigar severamente a quien calumnia, ofende y lastima la honra de las personas, inclusive de las que ya han fallecido.
Como dieron cuenta los medios de comunicación presentes, Romo fue quien profirió directamente las calumnias, ya que al tratar de justificar y defender la reforma legal que reconoce los matrimonios entre personas del mismo sexo, señaló al cardenal Ernesto Corripio Ahumada –quien falleció el 10 de abril de 2008– como parte de un grupo que estaría organizando una campaña en contra de las modificaciones al Código Civil local, aprobadas por la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF).
Cuando los reporteros le señalaron que Corripio ya estaba muerto, el legislador entonces aseguró que el cardenal tuvo un hijo que tiene su mismo nombre.“Tenemos información de que hay lazos familiares de la persona que asiste a estas reuniones, suponemos que es su hijo, que lleva el nombre de Ernesto y vamos a dar a conocer más datos en los próximos días.” ¡Qué manera de calumniar y difamar a quien llevó una vida ejemplar!
“Conceder el derecho de adoptar niños a parejas del mismo sexo constituye una flagrante violación a los derechos de los niños, reconocidos por la Convención Internacional de la Organización de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño, ya que, como demuestra la experiencia, la ausencia de la bipolaridad sexual crea obstáculos al desarrollo normal de los niños eventualmente integrados en estas uniones, con lo que se les somete a violencias de distintos órdenes. Esto, evidentemente, tiene repercusiones negativas, tanto para los individuos como para la sociedad,” expresó Víctor Sánchez Espinosa, Arzobispo de Puebla con quien coincido y a quien felicito por su valiente postura pública ante esta imposición que pone en riesgo el desarrollo de las personas y de la sociedad.
En el Partido Acción Nacional (PAN), adoptamos una postura firme de defensa a la dignidad de las personas y principalmente de los menores de edad; los niños no son cosa, no son un bien al que tengamos derecho, los niños tienen derechos propios, son personas sujetos de derechos que deben ser tutelados y respetados. Y precisamente lo que se ignoró en estas reformas fue atender a la defensa de los derechos de los niños.
Los panistas, en representación de la sociedad agraviada, recurriremos a la Suprema Corte de Justicia de la Nación para buscar la invalidez de estas reformas porque, como lo señaló César Nava presidente nacional del blanquiazul, atentan gravemente contra el sistema jurídico mexicano, contra la institución del matrimonio civil, contra la institución de adopción y, consecuentemente contra los derechos de los niños. Además se harán evidentes los vicios del procedimiento legislativo cometidos por perredistas y algunos priístas en la ALDF, al introducir el tema de la adopción de último minuto, siendo que ni siquiera se encontraba en la minuta del dictamen respectivo.
En un sistema democrático las decisiones las toman las personas que forman las instituciones, representando auténticamente a los intereses y los derechos de los habitantes que los eligieron, atendiendo también la regla de la discusión democrática, la cual es insustituible e irrenunciable. Estos dos principios fueron violados en estas reformas; para demostrarlo el PAN solicitó dos encuestas con el fin de conocer el punto de vista de la sociedad. Los sondeos fueron levantados por empresas serias como son GEA-ISA y BGC, coincidiendo en resultados muy similares.
A la pregunta: “¿Está usted de acuerdo o no en la celebración de matrimonios entre homosexuales, es decir, entre personas del mismo sexo?”El acuerdo o el acuerdo en parte, sumó en la encuesta de BGC de Ulises Beltrán, 46 por ciento; el desacuerdo o el desacuerdo en parte sumó el 43 por ciento y un 11 por ciento de la población encuestada se abstuvo o no supo qué contestar.
Adicionalmente a la pregunta: “¿Y está usted de acuerdo o en desacuerdo en la posibilidad de adoptar niñas y niños por parejas homosexuales?”En desacuerdo el 74 por ciento; de acuerdo el 19 por ciento; no sabe o no contestó, el siete por ciento. Según los datos de GEA-ISA.
Estos resultados demuestran el rechazo a que las parejas homosexuales puedan adoptar niños y la polarización social a los matrimonios del mismo sexo, lo que fue ignorado por los diputados del PRD.
En unos cuantos meses habrá elecciones en Puebla para elegir gobernador, presidentes municipales y diputados locales; es muy importante saber no solamente la opinión de los candidatos sobre este tema, sobre todo conocer la opinión institucional de los partidos, pues la amenaza de que en Puebla se cometan actos similares en contra de los derechos de los niños y de la institución familiar, está latente.
La memoria del Cardenal Corripio fue manchada y los que tuvimos la oportunidad de conocerlo damos fe de su bonhomía, mansedumbre, humildad y trabajo. Uno de los más preclaros pastores que ha tenido la Arquidiócesis de México, es reconocido por su gestión espiritual y su personalidad carismática, que lo llevaron a mejorar las líneas de acción de la Iglesia católica mexicana y a buscar una patria con libertad religiosa, que vio sus frutos con las reformas constitucionales durante su gestión, además de la visita del Papa Juan Pablo II y la canonización de San Juan Diego, ya como cardenal emérito.
Es menester también como ciudadanos, tomar parte activa en este debate cuando los ataques sistemáticos a nuestros valores por parte de los perredistas van en aumento, no sólo en el congreso donde los diputados federales católicos fuimos objeto de burlas por nuestras creencias (allí están las actas y debates) sino en lugares públicos como las incursiones violentas en la catedral de la ciudad de México por parte de los seguidores de López Obrador, molestos porque tocaban las campanas de la iglesia mientras ellos tenían una concentración con el peje en el zócalo.
Este es el verdadero rostro de le intolerancia de los perredistas, de los que se dicen demócratas pero pasan por encima de sus representados, de los que no respetan la dignidad de la persona y los derechos de los más indefensos como los niños que son abortados o que quieren dar en adopción.
En una alianza electoral, ¿Quién cederá, el PRD en sus difamaciones, calumnias y agenda en contra de la vida y el respeto a los niños; o el PAN en sus principios y valores?
Las instituciones de justicia en México deben castigar severamente a quien calumnia, ofende y lastima la honra de las personas, inclusive de las que ya han fallecido.
Como dieron cuenta los medios de comunicación presentes, Romo fue quien profirió directamente las calumnias, ya que al tratar de justificar y defender la reforma legal que reconoce los matrimonios entre personas del mismo sexo, señaló al cardenal Ernesto Corripio Ahumada –quien falleció el 10 de abril de 2008– como parte de un grupo que estaría organizando una campaña en contra de las modificaciones al Código Civil local, aprobadas por la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF).
Cuando los reporteros le señalaron que Corripio ya estaba muerto, el legislador entonces aseguró que el cardenal tuvo un hijo que tiene su mismo nombre.“Tenemos información de que hay lazos familiares de la persona que asiste a estas reuniones, suponemos que es su hijo, que lleva el nombre de Ernesto y vamos a dar a conocer más datos en los próximos días.” ¡Qué manera de calumniar y difamar a quien llevó una vida ejemplar!
“Conceder el derecho de adoptar niños a parejas del mismo sexo constituye una flagrante violación a los derechos de los niños, reconocidos por la Convención Internacional de la Organización de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño, ya que, como demuestra la experiencia, la ausencia de la bipolaridad sexual crea obstáculos al desarrollo normal de los niños eventualmente integrados en estas uniones, con lo que se les somete a violencias de distintos órdenes. Esto, evidentemente, tiene repercusiones negativas, tanto para los individuos como para la sociedad,” expresó Víctor Sánchez Espinosa, Arzobispo de Puebla con quien coincido y a quien felicito por su valiente postura pública ante esta imposición que pone en riesgo el desarrollo de las personas y de la sociedad.
En el Partido Acción Nacional (PAN), adoptamos una postura firme de defensa a la dignidad de las personas y principalmente de los menores de edad; los niños no son cosa, no son un bien al que tengamos derecho, los niños tienen derechos propios, son personas sujetos de derechos que deben ser tutelados y respetados. Y precisamente lo que se ignoró en estas reformas fue atender a la defensa de los derechos de los niños.
Los panistas, en representación de la sociedad agraviada, recurriremos a la Suprema Corte de Justicia de la Nación para buscar la invalidez de estas reformas porque, como lo señaló César Nava presidente nacional del blanquiazul, atentan gravemente contra el sistema jurídico mexicano, contra la institución del matrimonio civil, contra la institución de adopción y, consecuentemente contra los derechos de los niños. Además se harán evidentes los vicios del procedimiento legislativo cometidos por perredistas y algunos priístas en la ALDF, al introducir el tema de la adopción de último minuto, siendo que ni siquiera se encontraba en la minuta del dictamen respectivo.
En un sistema democrático las decisiones las toman las personas que forman las instituciones, representando auténticamente a los intereses y los derechos de los habitantes que los eligieron, atendiendo también la regla de la discusión democrática, la cual es insustituible e irrenunciable. Estos dos principios fueron violados en estas reformas; para demostrarlo el PAN solicitó dos encuestas con el fin de conocer el punto de vista de la sociedad. Los sondeos fueron levantados por empresas serias como son GEA-ISA y BGC, coincidiendo en resultados muy similares.
A la pregunta: “¿Está usted de acuerdo o no en la celebración de matrimonios entre homosexuales, es decir, entre personas del mismo sexo?”El acuerdo o el acuerdo en parte, sumó en la encuesta de BGC de Ulises Beltrán, 46 por ciento; el desacuerdo o el desacuerdo en parte sumó el 43 por ciento y un 11 por ciento de la población encuestada se abstuvo o no supo qué contestar.
Adicionalmente a la pregunta: “¿Y está usted de acuerdo o en desacuerdo en la posibilidad de adoptar niñas y niños por parejas homosexuales?”En desacuerdo el 74 por ciento; de acuerdo el 19 por ciento; no sabe o no contestó, el siete por ciento. Según los datos de GEA-ISA.
Estos resultados demuestran el rechazo a que las parejas homosexuales puedan adoptar niños y la polarización social a los matrimonios del mismo sexo, lo que fue ignorado por los diputados del PRD.
En unos cuantos meses habrá elecciones en Puebla para elegir gobernador, presidentes municipales y diputados locales; es muy importante saber no solamente la opinión de los candidatos sobre este tema, sobre todo conocer la opinión institucional de los partidos, pues la amenaza de que en Puebla se cometan actos similares en contra de los derechos de los niños y de la institución familiar, está latente.
La memoria del Cardenal Corripio fue manchada y los que tuvimos la oportunidad de conocerlo damos fe de su bonhomía, mansedumbre, humildad y trabajo. Uno de los más preclaros pastores que ha tenido la Arquidiócesis de México, es reconocido por su gestión espiritual y su personalidad carismática, que lo llevaron a mejorar las líneas de acción de la Iglesia católica mexicana y a buscar una patria con libertad religiosa, que vio sus frutos con las reformas constitucionales durante su gestión, además de la visita del Papa Juan Pablo II y la canonización de San Juan Diego, ya como cardenal emérito.
Es menester también como ciudadanos, tomar parte activa en este debate cuando los ataques sistemáticos a nuestros valores por parte de los perredistas van en aumento, no sólo en el congreso donde los diputados federales católicos fuimos objeto de burlas por nuestras creencias (allí están las actas y debates) sino en lugares públicos como las incursiones violentas en la catedral de la ciudad de México por parte de los seguidores de López Obrador, molestos porque tocaban las campanas de la iglesia mientras ellos tenían una concentración con el peje en el zócalo.
Este es el verdadero rostro de le intolerancia de los perredistas, de los que se dicen demócratas pero pasan por encima de sus representados, de los que no respetan la dignidad de la persona y los derechos de los más indefensos como los niños que son abortados o que quieren dar en adopción.
En una alianza electoral, ¿Quién cederá, el PRD en sus difamaciones, calumnias y agenda en contra de la vida y el respeto a los niños; o el PAN en sus principios y valores?